∆
El kilómetro cuadrado más sagrado del mundo, donde aveces se puede captar su esencia en apenas 24 horas. En cada viaje que realizamos, siempre es esa nuestra intención. Hoy, nuestra directora de Viajes Gyumar Group, Syntya Pintado, nos acerca un poco más al centro espiritual de la urbe… La antigua Jerusalen.

- ZOCO ARABE (zoco de Al-Qattanin, en la Ciudad Vieja)
- SANTO SEPULCRO (en la Ciudad Vieja)
- PUERTA DE DAMASCO
- MURO DE LAS LAMENTACIONES (en la Ciudad Vieja)
- HUERTO DE GETSEMANI (en el Monte de los Olivos)
- TUMBA DEL JARDIN (Conrad Schick St)
- HOTEL GRAND COURT (St George St)
- MERCADO MAHANE YAHUDA (Mahane Yahuda St)
- PUERTA DE JAFFA
Suena el despertador, abrir los ojos y justamente al abrir la ventana de la habitación comienzas a contemplar los lugares santos como una antigua postal fotográfica que podría emocionar al mayor de los escépticos, así sea indistitamente fervoroso cristiano, judío, católico, musulmán o simplemente ateo.
Jerusalen o “casa de la paz” que significa en hebreo lleva arrastrando miles de años en su historia que requiere más de 24 horas para una visita.
Turismo espiritual
Antes de ingresar al casco antiguo de Jerusalen conviene disfrutar y relajarse con un desayuno buffet en el Grand Court, un hotel de categoría 4 estrellas superior ubicado en el centro de la ciudad con una característica particular del gran comedor iluminado por el sol y una terraza del jardín – aunque, si preferimos alejarnos un poquito del centro podemos saborear el desayuno inspirado en la vinícola de los Montes de Judea en el Prima Park, un hotel de categoría turista –. Una vez adentrados a la ciudad vieja nos quedamos perplejos con el paisaje que impresiona: las murallas del Rey David.
Desde Mamilla – puente entre lo material y lo espiritual, entre lo nuevo y lo viejo, entre Mango y la Biblia – uno accede con más rapidez al casco antiguo a través de la Puerta de Jaffa. También, desde la puerta de Damasco con su umbral arcado, el barrio musulmán conduce al zoco árabe con todo su caos organizado. Sediento por rentabilizar una localización tan especial, el vendedor palestino se suele quejar, con razón, de que no hay suficientes turistas. Y los que hay, protesta, “entran, preguntan y se van sin comprar”.
Tras la Vía Dolorosa, espera el Santo Sepulcro. Las iglesias grecortodoxa, armenia y católica rigen con rigurosas desavenencias el lugar donde la tradición cristiana sitúa la tumba de Jesucristo. De ahí se llega al Muro de las Lamentaciones (Kotel, en hebreo). El último vestigio del Templo judío es lo más sagrado para el judaísmo, junto a lo que conocen como Har Bayit (Monte del Templo). Para los musulmanes se trata de Haram Al Sharif (Noble Santuario) que alberga la Cúpula de la Roca y la Mezquita Al Aqsa, el tercer lugar más sagrado del Islam.
Nosotros como visitantes turistas no musulmanes podemos, quizá, hacerse un selfie con la cúpula dorada revestida de 24 quilates de oro regalados por el rey Hussein de Jordania.
Un dolor que se debe recordar
Tras recorrer el kilómetro cuadrado más sagrado del mundo, debe visitar el kilómetro más escalofriante: el Museo del Holocausto Yad Vashem. El centro muestra caras, nombres y espeluznantes historias que se esconden detrás de las cifras del genocidio judío al tiempo. Miles de educadores de todo el mundo llegan a sus cursos para aprender a enseñar las lecciones del mayor crimen del siglo XX.
Esencia de La Pasión
A Getsemaní, situado en la parte baja de una de las faldas del Monte de los Olivos, donde Jesús estuvo ahí para orar y meditar antes de que fuera entregado por su discípulo Judas y aprehendido por guardias del templo, según el Evangelio… Cientos de peregrinos se concentran desde la mañana hasta finalizar la tarde.
Colores y aromas
El marcado Mahane Yehuda conserva su autenticidad con todo su caos, originalidad y bullicio. Hay muchas ofertas para comprobar las exitosas fusiones de la comida autóctona con la italiana, francesa, asiática, española… Bajo la dirección de tres prestigiosos chefs (Assaf Granit, Yossi Elad y Uri Navon).
En realidad, Jerusalén no necesita esforzarse para demostrar que es el centro espiritual del mundo, aunque sí debería hacer más para lucir sus caras eclipsadas por la alargada sombra de la historia. Una historia que, por otro lado, la hace tan especial y única. Generación tras generación, es amada y evocada por millones en todo el mundo. Una ciudad de ensueño eterno que esperamos estar por donde Jesucristo caminó. ¡Shalom!
Puede enviar cotización en detalle? Gracias
Hola Lidia, por favor, revise su correo de gmail. Acabamos de enviarle el itinerario de viaje a Tierra Santa con salida desde Lima.